No siempre la audiencia dominicana tiene la oportunidad de apreciar una
película puertorriqueña, pese a estar separados solo por el Canal de la
Mona. El jueves pasado se estrenó en nuestras salas de cine “Broche de
oro”, una producción boricua, de la cual su director, Raúl Marchand
Sánchez, y varios de sus actores visitaron Santo Domingo para
promocionarla.
De esta manera, Jacobo Morales, Diego de la Texera y Luis Raúl,
intérpretes de esta película en la que un grupo de ancianos se escapa de
un asilo con el fin de asistir a una competencia de surf, junto al
mencionado realizador, conversaron con LISTÍN DIARIO sobre esta comedia
crepuscular, y como no, sobre el cine que se hace en nuestros
respectivos países.
Contrario a lo que pudiera pensarse, y gracias al auge que tiene la
producción del llamado séptimo arte en nuestra isla, el cine dominicano
está en un mejor momento que el que vive el vecino país, donde, según
expresaron, no reciben ayuda del gobierno.
“Ellos saben que los cineastas, casi todos en su mayoría, somos
independentistas, y que la voz de nosotros va a decir unas palabras que
ellos no quieren escuchar”, comenta Diego de la Texera (Ponce, 1943),
director y cinematografista, quien hasta “Broche de oro”, nunca había
hecho cine en su país.
Expresan que en “La Isla del Encanto”, la producción de cine fluctúa de
año en año. “No hay consistencia, ni hay voluntad de las esferas
oficiales, ni hay voluntad real para echar adelante la cinematografía”,
dice de su lado Jacobo Morales (Lajas, 1934), actor, poeta, dramaturgo y
cineasta, cuya película “Lo que le pasó a Santiago”, de 1989, fue
nominada al Oscar a la mejor película extranjera.
Según Marchand Sánchez, y contra todo pronóstico, su comedia fue un
éxito de taquilla en su Puerto Rico, y de la misma, Luis Omar O’Farrill,
quien hace el papel del nieto surfista, dijo en una entrevista que
“muestra al Puerto Rico que todo boricua busca ver”.
“Fue la palabrería de la gente, el boca a boca, que le dieron una
oportunidad a la película; el puertorriqueño como audiencia, es difícil,
a diferencia del dominicano, que apoya su cine”, asegura Marchand (San
Juan, 1967), y quien ha sido editor de las películas dominicanas “La
hija natural”, (2011, de Leticia Tonos) y “Biodegradable”, de Juan
Basanta (aún sin estrenar).
Es por esto que el realizador quisiera que, por un lado se hiciera más
cine en su país y que vayan a verlo, como han hecho con el filme que
presentan ahora en nuestras salas. “Nos ha abierto los ojos y nos ha
indicado el camino a seguir nosotros sin ayuda del gobierno, que es un
ejercicio además para la independencia”, agrega De la Texera, quien ve
con buenos ojos el éxito que ha tenido este filme en la juventud,
protagonizado por personas de la tercera edad.
“Los jóvenes, desde los teenegers en adelante, iban dos y tres veces”,
sostiene el comediante Luis Raúl, quien alaba el hecho de que los
cineastas de nuestro país se beneficien de una herramienta como la ley
de cine.
Es por eso que el equipo está feliz de que su obra haya llegado a la
gran audiencia.
“El precedente en esta época ha sido maravilloso y esperanzador, de
saber que ese público está ahí”, valora De la Texera.
De la película
Cuando Rafael (Jacobo Morales), Pablo (Diego de la Texera) y Anselmo (Adrian García) escapan de un hogar de ancianos, descubren que no hay edad para ser joven.
Cuando Rafael (Jacobo Morales), Pablo (Diego de la Texera) y Anselmo (Adrian García) escapan de un hogar de ancianos, descubren que no hay edad para ser joven.
Su viaje los lleva a la playa donde Carlos, el nieto de Rafael,
participa en una competencia de surfing. Juntos viven un día lleno de
aventuras, risas, romances y amistad que cambia la vida de todos y hace
posible el reencuentro de tres generaciones. “Broche de oro” celebra la
vida y los lazos familiares.