Hace un buen rato que los relojes
inteligentes dejaron de ser un producto extraño, habiendo muchas marcas
(conocidas y no tanto) que ofrecen los suyos propios. En China tampoco
se quedan atrás, gracias a inWatch y su inWatch One,
que viene con Android y que además se puede conectar a redes
telefónicas.
El inWatch One tiene varias características
que lo hacen más parecido a un teléfono que a cualquier otra cosa.
Además de soporte para GSM, viene con cámara de 2 megapixeles,
procesador a 1,2 GHz, Wi-Fi, Bluetooh y radio GPS. La pantalla es a
color, de 1,54 pulgadas y 240 x 240 pixeles, mientras que la batería es
de 500mAh.
Su sistema operativo es una versión súper
recortada de Android 4.o que hasta tiene su propio nombre (inDroid),
y viene con soporte nativo para la mayoría de las redes sociales
específicas de los chinos. Y considerando sus características, el precio
no parece tan caro al lado de otros relojes inteligentes: USD $293
aproximadamente, aunque para conseguir uno habría que entrar a
importarlo desde su país
de origen y tener en cuenta algunas barreras idiomáticas.
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